lunes, 2 de marzo de 2009

Relato Recuerdos

RECUERDOS



Sara miraba a su alrededor pensativa, ausente. Quería guardar en su memoria cada paisaje, cada mirada, cada sonrisa.

Mientras esperaba sentada a que el tren partiera, sus recuerdos parecían reflejarse en aquel cristal transparente que ofrecía como único paisaje un futuro incierto.

Sentimientos opuestos nacían en su interior: miedo, esperanza, tristeza, nostalgia, alegría.

Para lograr su sueño debía abandonar su casa, su familia, sus amigos y a él. Él era alguien muy importante para ella. Cuando estaba a su lado sentía que sus problemas desaparecían dando paso a un sentimiento de amor y bienestar que se expandía por todo su cuerpo.

Ambos muchachos se conocían desde que eran pequeños ya que se criaron en el mismo lugar. A medida que iban creciendo Sara notaba que poco a poco el que había sido hasta ahora su mejor amigo se convertía en alguien imprescindible para ella. Pero un día sus caminos se separaron. El padre de Scott había sido trasladado y él debía marcharse junto con su familia a otra ciudad.

Antes de separarse hicieron una promesa: pasara lo que pasara algún día volverían a encontrarse y entonces nada ni nadie volvería a separarlos jamás. Sara rompió su colgante en dos mitades como símbolo de unión ofreciéndosela a la única persona que había conseguido robarle el corazón. Nunca podría olvidar aquella noche de verano.

Habían pasado ya tres años desde aquel día y Sara aún podía sentir el calor de su cuerpo al abrazarla. Instintivamente cogió la mitad de su broche y lo estrechó en su mano.

El viaje transcurrió en pocas horas y el tren llegaba a su destino a la hora prevista. Sara descendió de aquel tren dispuesta a comenzar una nueva vida.

Sacó de su bolsillo un pequeño papel donde tenía escrito el nombre del lugar donde iba a vivir a partir de ahora. Como todo lo que la rodeaba era nuevo para ella comenzó a caminar sin un rumbo preestablecido, quería conocer todo sobre el que iba a ser su nuevo hogar.

Entre la multitud vio un objeto caer al suelo. Sara cogió la cartera para intentar devolvérsela a su dueño pero ya era demasiado tarde.

Calle San Francisco unas horas después

La persona a la que pertenecía la cartera se encontraba sentado en su cama descansando cuando oye que llaman a su casa.
Detrás de aquella puerta ve a una chica que le ofrece un paquete. Al abrirlo ve su cartera y una nota dentro de ella.
Al leer la nota aquel muchacho sintió que su corazón latía más fuerte que nunca. No podía creer que estuviera frente a él de nuevo. Sin poder contenerse ambos muchachos se fundieron en un cálido abrazo.


La nota del paquete contenía tan sólo tres palabras: Bienvenido a casa.
Junto a la nota había un regalo muy especial: El broche había sido unido de nuevo.

FIN

4 comentarios:

  1. Muy bonito, te sigo a partir de ahora ;)

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  2. Muchas gracias maría por tu comentario, me alegro que te guste. :P

    Un beso

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  3. a mi tb me gusto!!! ya empezaba a decir que al final solo eran recuerdos jejeje, precioso Slane_Blaze!!!

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  4. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

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